Semillas de Violetas Cautivas
"Reunir emociones, dar a luz sentimientos, pasiones y fantasías. Ofrecer pensamientos para que sean compartidos por aquéllos que lo deseen.
Ese es nuestro trabajo: mantener encendida la llama de la comunicación entre los Hombres.
Nuestro cajón de letras está vacío. Porque acariciamos la ilusión de sentirlas latir en las páginas de este libro, y así puedan penetrar en el corazón de los que pongan sus ojos en él..."
Sus autores: Diana C. Batista, Gustavo M. Castro, Gisela A. Cermenaro, Leopoldo L. Melo, José E, Paredero, Héctor H. Picallo, Ezequiel Risso, Ricardo J. Sabugo, Sebol, Marta S. Pizzo, Vanina G. Sttaffolarini, Walter O. Stella y Wally Zambón.
(Editado por la Asociación Literaria La Besana, año 1996)
Ese es nuestro trabajo: mantener encendida la llama de la comunicación entre los Hombres.
Nuestro cajón de letras está vacío. Porque acariciamos la ilusión de sentirlas latir en las páginas de este libro, y así puedan penetrar en el corazón de los que pongan sus ojos en él..."
Sus autores: Diana C. Batista, Gustavo M. Castro, Gisela A. Cermenaro, Leopoldo L. Melo, José E, Paredero, Héctor H. Picallo, Ezequiel Risso, Ricardo J. Sabugo, Sebol, Marta S. Pizzo, Vanina G. Sttaffolarini, Walter O. Stella y Wally Zambón.
(Editado por la Asociación Literaria La Besana, año 1996)
Mi cama... compañera
Desde su sitio, inmóvil,
parece contemplarme
el lecho, cobijante, mullido,
tibio, quieto.
Sus sábanas fragantes
de floridos diseños
invitan al reposo,
acunan buenos sueños.
Una almohada aburrida
recibe a la conciencia
hambrienta por poder
confesar sus secretos.
Son tantos años ya
de apoyar la cabeza,
de intimar sensaciones
o de llorar sobre ella.
De imaginar mañanas,
de regalar perezas,
de jugar con mis hijos
a ésa, la mejor guerra
de tirarse almohadones,
de cosquillas inquietas.
Y esas noches de amantes
que tu me das en ella
mi cama... compañera,
sin preguntarme nada
cada noche, me espera.
Desde su sitio, inmóvil,
parece contemplarme
el lecho, cobijante, mullido,
tibio, quieto.
Sus sábanas fragantes
de floridos diseños
invitan al reposo,
acunan buenos sueños.
Una almohada aburrida
recibe a la conciencia
hambrienta por poder
confesar sus secretos.
Son tantos años ya
de apoyar la cabeza,
de intimar sensaciones
o de llorar sobre ella.
De imaginar mañanas,
de regalar perezas,
de jugar con mis hijos
a ésa, la mejor guerra
de tirarse almohadones,
de cosquillas inquietas.
Y esas noches de amantes
que tu me das en ella
mi cama... compañera,
sin preguntarme nada
cada noche, me espera.
3 comentarios:
hola marta , soy gustavo martin castro , me encontre con la grata sorpresa de que la besana continuo labor...participe en la fundacion de la besana , luego de el cenaculo junto a hector , jose , walter y vos...por mi parte segui escribiendo, no volvi a publicar , pero me trae gratisimos recuerdos de aquellas epocas de escritura y charlas...saludos a todos!!!
Hola queridooooooo, qué gusto leer tu comentario! También guardo unos recuerdos hermosos de esos tiempos! Ojalá nos volvamos a ver pronto, besos!
Querida amiga del alma, casi por casualidad cai en tu sitio, y una energia maravillosa de recuerdos emociones y sensaciones a recorrido todo mi ser.
Estoy convencido que haber compartido mi infancia, adolescencia con ustedes me forjo como ser, como persona conectada intimamente con la emocionalidad, con el poder de la palabra. Hoy ya con treinta y tantos ya no escribo tanto, he cambiado los papel por la palabra hablada.
Um fuerte abrazo
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