Amelia
(en el día de tu cumple 82)
Alguna vez estuve dentro tuyo
y oí latir la vida entre tu vientre,
desde ese día y aún en el presente
te estoy llamando, madre, con orgullo.
Desparramás ternuras a tu paso,
sos compañera fiel en el camino,
tenés el ángel que te dio el destino
y se encuentra cobijo en tu regazo.
Sos pequeña, gigante, mediadora
no imagino viajar sin tu sonrisa
por lo que de crecer, no siento prisa
y añoro nuestras charlas en la aurora.
Me brindás tu paciencia y tu alegría,
amortiguás el golpe y das aliento,
así es que me emociona este momento
en que puedo brindarte una poesía.
Agradezco a la vida de tenerte
porque lo que sembraste ha florecido
y si es cierto que a veces has sufrido,
mira tus frutos... y verás tu suerte.
4 comentarios:
Gracias por permitirme conocer tu blog, ¡buenísimo!
Besos. Susana
Gracias a vos, Su! un beso
Marta te merces este espacio,gracias por permitirme disfrutarlo.Siempre"Avanti"
Norma
Gracias Normita!! Juntas en este hermoso camino. Un beso
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